Las oportunidades de la vida.

Por: Hernán Baquero Bracho.
La costumbre con la costumbre vence. Hablando del camino del éxito, en la vida existen las oportunidades, que se dan en el momento preciso y oportuno. Ni en un milímetro mas, ni en un milímetro menos. En la jungla o en la selva, hay que estar alerta. Allí en esa jungla no hallamos ni vacas ni ovejas. No podrían sobrevivir.

En esa jungla, tus agudos ojos todo lo ven y tus oídos exploran el área como un radar para detectar el más leve sonido. Sientes las vibraciones de la tierra por medio de tus pies sensitivos y tu nariz percibe cualquier olor extraño. Todo tu ser está a la expectativa de una oportunidad para lanzarte a la carga. Eres como el gatillo montado de una pistola: lista a disparar.
¡Espera! ¿Qué es ese olor? Tu cuerpo está tenso, lista para saltar a la acción. Lentamente volteas tu cabeza hacia la dirección del olor. Tus ojos vigilan para captar cualquier señal de una oportunidad verdadera. ¡Tus oídos perciben un leve ruido en la maleza! Un olor extraño pasa por tu nariz, ya está listo para explotar. ¿Será una oportunidad o será un torpedo? Clavas sin pestañar tu mirada hacia adelante. Tu cabeza gira de emoción y los músculos de tus piernas están tensos con energía.

De repente, ¡La divisas! ¡Es la oportunidad! También ella te ve y como un disparo ambos arrancan a través de la jungla. Cuerpo pequeño, pero ágil a todo escape hacia la oportunidad, venciendo cuantos obstáculos se oponen en tu camino. Los arboles y la vegetación te hieren la piel pero tu ni siquiera lo sientes. Tienes la oportunidad a la vista y le estas ganando terreno. Es, sin lugar a dudas, una buena oportunidad y la persecución es ardua y prolongada.
Comienzas a cansarte. ¿Te estará evadiendo? ¡Por Dios!, exclamas. ¡Soy un luchador de la vida! Recuperas la respiración y tus ojos se tornan fiero y el vaho de tu aliento se convierte en pavor, en el fresco aire mañanero de los ríos y las montañas, sigues la persecución sin desfallecer un solo momento.

De repente, ¡Lo logras! Tu oportunidad se cansó y tú la alcanzaste, la dominas y luego descansas un momento, tus grandes pulmones acezando, tus piernas casi doblegándose, tu piel herida separada y ensangrentada pero tú te solazas en la emoción de tu victoria.

Lo anterior es la radiografía exacta de lo que le ha sucedido al profesional villanuevero Jhon Jairo Montero Daza (Administrador de Empresas de La Universidad de La Guajira, especializado en Planeación Educativa con Énfasis en Desarrollo Humano, con Diplomados en Gerencia de Municipios y en Liderazgo y Gestión Social, entre otros), el Director actual de Coldeportes en La Guajira, a quien la vida le ha dado oportunidades en su trasegar por los obstáculos que le ha tocado sortear, en esa jungla de una ciencia llamada política. Las oportunidades de primero a punta de solo amor materno, de vencer tantos sufrimientos y tantas tristezas por los espinos de su crianza, para lograr un mejor mañana, como en efecto ha sucedido. La oportunidad que le dio el Barrio Blanca Martínez para ser su Presidente de Acción Comunal, en el cual fue reelegido 5 veces, de 1991-1996. Luego las oportunidades, para convertirse en un Bachiller, y eso no fue fácil. Pero lo logró. Luego la oportunidad que le brindó la Gobernación de La Guajira para ser Promotor de Acción Comunal para su pueblo, desde 1997 a 1998, cargo que desempeñó con lujo de competencia. Vino después la oportunidad que le dio la vida para ser Asesor de Consejería de Paz o Concejero Municipal de Paz en la Alcaldía de Villanueva, con dependencia de la Gobernación de nuestro departamento, donde realizó un trabajo excelente por la situación de violencia que estaba viviendo este bello municipio del sur de La Guajira.

Luego la mayor oportunidad de ser un profesional, ahí si le tocó herirse las piernas, pero sobre todo el entendimiento, para salir adelante. Otra oportunidad, otra meta. Y también la venció. Y como ha nacido para algo importante, como es el de ser un líder innato de las bases populares y ese reconocimiento lo logró, cuando en el gobierno de Hernando Deluque Freyle, le dio la oportunidad de demostrarle a propios y a extraños, que era capaz y que estaba escalando peldaños por el sendero del éxito y de las causas más nobles. Y en la Secretaria de Gobierno a nivel departamental, fue nombrado como Director Operativo de la Oficina de Participación Comunitaria de La Guajira y allí demostró sus dotes de liderazgo de que está formado y de lo que Dios puso en su corazón bueno y en su alma generosa. Mostró y demostró su capacidad de servicio, su eficiencia y su eficacia en los resultados obtenidos en la labor realizada y reconocida por todo el departamento, especialmente en su Villanueva del alma, donde dejó huellas de su trabajo, otra oportunidad que le dio la vida y que venció a la jungla contra todos los pronósticos.
Luego en la campaña a la gobernación a favor del líder carismático Ingeniero Jorge Pérez Bernier, se la jugó toda con el candidato a la Alcaldía de Villanueva, Medico Luis Erasmo Dangond Cuadrado y por ende a favor del jefe del movimiento nueva Guajira, movimiento en el que inició bajo las lides del ex gobernador Álvaro Cuello Blanchar y esa oportunidad llegó con creces. Ganó por partida doble y los frutos de su esfuerzo se vieron compensados, bajo el liderazgo de Enrique Luis Peñaloza, como diputado nato del pueblo villanuevero, quien lo llevó a la dirección de Coldeportes en nuestro departamento. Posición que ha enaltecido con su tesón, su eficiencia, sus logros, al rescatar a una entidad que encontró en una situación difícil e inviable en lo financiero y con un pasivo de grandes proporciones. Pero esta oportunidad que le dio la vida, también ha vencido todos los obstáculos y toda la maleza mala que se le atravesó en el camino.

Es el nuevo despertar de Villanueva, que también ha vencido las grandes dificultades que se le han presentado. Las oportunidades de la vida, le han dado al profesional Jhon Jairo Montero Daza, de tener un alma guerrera pero llena de nobleza, de no tenerle miedo a la jungla y de todos los obstáculos que en ella se hallen. De ser un luchador nato, que comenzó desde abajo, de los estratos más humildes, pero a punta de esfuerzo, de sueños, de visión y de misión de vida a escalar peldaños venciendo a los espinos y logrando posicionarse en la escalera del éxito y de las oportunidades que vienen y no vuelven y que hay que aprovecharlas en bien de su tierra, de su Guajira y de su familia por un mejor mañana. ¡Así es y así será!