Por: Aliskair De La Hoz.
Villanueva el municipio de las preocupaciones permanentes que a veces fáciles, las hacemos insolucionables por la falta de iniciativas de la misma gente que con su espíritu paternalista sólo se sienta en laureles a esperar que todo lo resuelvan los dirigentes que improvisadamente elegimos, consecuencia de ello, el que no se tomen con responsabilidad las decisiones a favor del ciudadano común.
El tema que hoy nos concierne es el de la prestación de los servicios públicos, que con su mala calidad, falta de continuidad y sobrefacturación, han sido causantes de molestias al más sosegado de los mortales.
En la presente semana se elegirán los veedores de los servicios públicos en Villanueva, pero, ¿Qué requisitos debe cumplir un veedor de servicios públicos? Si es que actualmente contamos con empresas que no tienen interés alguno de una prestación optima de los servicios básicos. La responsabilidad que se asume no tiene que verse bajo ninguna circunstancia como plataforma política como suele suceder en este tipo de organizaciones, porque cuando se convoca a la comunidad para reclamar cualquier tipo de situación, son estas reuniones las que comienzan a parir los nuevos candidatos al concejo, alcaldías, asambleas y más.
Las personas que asumen la responsabilidad de veedores, deben tener la capacidad de liderazgo, pero la de un líder verdadero, que convenza con auténticos argumentos y firmes propósitos que direccionen causas comunes y no los que se aprovechan de estas circunstancias para favorecerse políticamente, y mostrar ese poder de convocatoria como fortín político o cheques en blanco representados en votos.
Pero si nos vamos a empresas que anteriormente le pertenecían administrativamente al municipio y que han pasado a ser operadas por entidades de carácter privado; la empresa Aguas del Sur, desde el mismo momento que llegó a operar y gestionar las obras de infraestructura y la prestación de agua y alcantarillado, se convirtió en el hijo que nadie quiere, debido a que hoy, a más de un lustro de actividades en Villanueva, no han podido resolver el problema de la mala calidad del servicio, una pobre atención a los reclamos de los usuarios y después de pactar unos acuerdos hace cerca de dos años, no han presentado la solución que la ciudadanía necesita. El servicio se cobra normalmente, pero en verano no hay un buen abastecimiento en el acueducto lo que hace necesario el racionamiento del servicio, y en invierno debido a las fuertes crecientes, la turbiedad es el pan de cada día, ¿Quién se atreve a consumir agua que además de tener mala calidad sale en nuestro grifo turbia? Recientemente el ministerio del interior hizo el llamado a los alcaldes a que tomen las medidas necesarias para prevenir el tema de las crecientes y los acueductos municipales, de los cuales hace mención a los del departamento de La Guajira. Parece que a los mandatarios hay que castigarlos para que hagan las cosas bien porque ahora el gobierno central se la pasa amenazando con sanciones a los burgomaestres que no tomen en cuenta estos avisos.
Por otra parte existe el tema del aseo en el municipio, han existido dos empresas de garaje, que sólo se han interesado en aporte del subsidio al servicio de la administración municipal que ronda cerca de los diez millones de pesos mensuales. La primera funcionó cuando se liquidó la Empresa de Servicios Públicos municipales, creada en la administración de Juan Félix Daza Cárdenas; al asumir como alcalde municipal Jorge Juan Orozco Sánchez, quien en ese momento era contradictor político de su antecesor, decidió acabar con el convenio y posteriormente abrir la licitación para la prestación del servicio, adjudicada a la empresa SANEAR DE LA GUAJIRA por un período de 5 años. A su vez, el actual administrador municipal Luis Erasmo Dangond, que no comulgó en ese momento políticamente con Orozco Sánchez, decidió no hacer los aportes que el municipio en materia de subsidios al servicio sin una evaluación de la operatividad de la empresa y de ésta manera se sigue el circulo vicioso de la política villanuevera que afecta directamente a la comunidad, ojalá visitaran sectores como 6 de Abril, Hormigueral, las salidas del municipio y muchos lugares más, invadidos por las basuras y ahora los pañitos tibios son las campañas de aseo que se pretenden organizar en el pueblo, como si estuviésemos en campañas de escuelitas de primaria.
En un reciente informe de evaluación del concejo municipal, textualmente se habla de el tema de las concesiones de ésta manera: “El contrato de concesión suscrito con la empresa SANEAR de la Guajira para la prestación del servicio de aseo del municipio está suspendido ocasionando a la comunidad un gran perjuicio. No se ha acatado las recomendaciones hechas por la superintendencia de servicios públicos (SSPD) en cuanto a la prestación directa y en la actualidad la administración contrata el servicio sin considerar los requerimientos legales para atender esta obligación. Los subsidios se están utilizando para cancelar esta contratación sin estar reconocida por (SSPD). Aun no conocemos un proceso jurídico formal en contra de la empresa SANEAR por incumplimiento de control o su liquidación.
El contrato de concesión 001 del 2003 para el mantenimiento y operación de la infraestructura del servicio de alumbrado público durante 15 años en manos de la empresa SITE Ltda. Se ha convertido en un gran problema para el municipio, el beneficio de la contribución que hacen los ciudadanos es para ELECTRICARBE, empresa que cobra y suministra la energía al sistema. Casualmente lo recaudado cada mes de los contribuyentes es el valor de la energía suministrada y el municipio con sus calles oscuras, esta anomalía no ha sido investigada por la administración, planeación municipal no conoce el inventario de luminarias en servicio para saber cuál es el consumo real y el valor que se debe pagar, el excedente debe ser para cancelar al concesionario.
La empresa SITE encargada del mantenimiento reclama el pago de sus servicios, que no se ha hecho desde hace más de cuatro años asciende la deuda a más de $ 900.000.000. La administración municipal no ha buscado un mecanismo para conciliar con esta empresa buscando un plan de pagos y el municipio esta a puertas de un cuantioso proceso jurídico entablado por el concesionario y nuestro pueblo seguirá a oscuras pagando una contribución injusta que puede ser demandada”.
Las cosas están así de claras, el problema existe, sólo con voluntad, responsabilidad, ganas y verdadera vocación de servicio y el interés por lo general y no lo particular, podemos comenzar por un buen camino.
El tema que hoy nos concierne es el de la prestación de los servicios públicos, que con su mala calidad, falta de continuidad y sobrefacturación, han sido causantes de molestias al más sosegado de los mortales.
En la presente semana se elegirán los veedores de los servicios públicos en Villanueva, pero, ¿Qué requisitos debe cumplir un veedor de servicios públicos? Si es que actualmente contamos con empresas que no tienen interés alguno de una prestación optima de los servicios básicos. La responsabilidad que se asume no tiene que verse bajo ninguna circunstancia como plataforma política como suele suceder en este tipo de organizaciones, porque cuando se convoca a la comunidad para reclamar cualquier tipo de situación, son estas reuniones las que comienzan a parir los nuevos candidatos al concejo, alcaldías, asambleas y más.
Las personas que asumen la responsabilidad de veedores, deben tener la capacidad de liderazgo, pero la de un líder verdadero, que convenza con auténticos argumentos y firmes propósitos que direccionen causas comunes y no los que se aprovechan de estas circunstancias para favorecerse políticamente, y mostrar ese poder de convocatoria como fortín político o cheques en blanco representados en votos.
Pero si nos vamos a empresas que anteriormente le pertenecían administrativamente al municipio y que han pasado a ser operadas por entidades de carácter privado; la empresa Aguas del Sur, desde el mismo momento que llegó a operar y gestionar las obras de infraestructura y la prestación de agua y alcantarillado, se convirtió en el hijo que nadie quiere, debido a que hoy, a más de un lustro de actividades en Villanueva, no han podido resolver el problema de la mala calidad del servicio, una pobre atención a los reclamos de los usuarios y después de pactar unos acuerdos hace cerca de dos años, no han presentado la solución que la ciudadanía necesita. El servicio se cobra normalmente, pero en verano no hay un buen abastecimiento en el acueducto lo que hace necesario el racionamiento del servicio, y en invierno debido a las fuertes crecientes, la turbiedad es el pan de cada día, ¿Quién se atreve a consumir agua que además de tener mala calidad sale en nuestro grifo turbia? Recientemente el ministerio del interior hizo el llamado a los alcaldes a que tomen las medidas necesarias para prevenir el tema de las crecientes y los acueductos municipales, de los cuales hace mención a los del departamento de La Guajira. Parece que a los mandatarios hay que castigarlos para que hagan las cosas bien porque ahora el gobierno central se la pasa amenazando con sanciones a los burgomaestres que no tomen en cuenta estos avisos.
Por otra parte existe el tema del aseo en el municipio, han existido dos empresas de garaje, que sólo se han interesado en aporte del subsidio al servicio de la administración municipal que ronda cerca de los diez millones de pesos mensuales. La primera funcionó cuando se liquidó la Empresa de Servicios Públicos municipales, creada en la administración de Juan Félix Daza Cárdenas; al asumir como alcalde municipal Jorge Juan Orozco Sánchez, quien en ese momento era contradictor político de su antecesor, decidió acabar con el convenio y posteriormente abrir la licitación para la prestación del servicio, adjudicada a la empresa SANEAR DE LA GUAJIRA por un período de 5 años. A su vez, el actual administrador municipal Luis Erasmo Dangond, que no comulgó en ese momento políticamente con Orozco Sánchez, decidió no hacer los aportes que el municipio en materia de subsidios al servicio sin una evaluación de la operatividad de la empresa y de ésta manera se sigue el circulo vicioso de la política villanuevera que afecta directamente a la comunidad, ojalá visitaran sectores como 6 de Abril, Hormigueral, las salidas del municipio y muchos lugares más, invadidos por las basuras y ahora los pañitos tibios son las campañas de aseo que se pretenden organizar en el pueblo, como si estuviésemos en campañas de escuelitas de primaria.
En un reciente informe de evaluación del concejo municipal, textualmente se habla de el tema de las concesiones de ésta manera: “El contrato de concesión suscrito con la empresa SANEAR de la Guajira para la prestación del servicio de aseo del municipio está suspendido ocasionando a la comunidad un gran perjuicio. No se ha acatado las recomendaciones hechas por la superintendencia de servicios públicos (SSPD) en cuanto a la prestación directa y en la actualidad la administración contrata el servicio sin considerar los requerimientos legales para atender esta obligación. Los subsidios se están utilizando para cancelar esta contratación sin estar reconocida por (SSPD). Aun no conocemos un proceso jurídico formal en contra de la empresa SANEAR por incumplimiento de control o su liquidación.
El contrato de concesión 001 del 2003 para el mantenimiento y operación de la infraestructura del servicio de alumbrado público durante 15 años en manos de la empresa SITE Ltda. Se ha convertido en un gran problema para el municipio, el beneficio de la contribución que hacen los ciudadanos es para ELECTRICARBE, empresa que cobra y suministra la energía al sistema. Casualmente lo recaudado cada mes de los contribuyentes es el valor de la energía suministrada y el municipio con sus calles oscuras, esta anomalía no ha sido investigada por la administración, planeación municipal no conoce el inventario de luminarias en servicio para saber cuál es el consumo real y el valor que se debe pagar, el excedente debe ser para cancelar al concesionario.
La empresa SITE encargada del mantenimiento reclama el pago de sus servicios, que no se ha hecho desde hace más de cuatro años asciende la deuda a más de $ 900.000.000. La administración municipal no ha buscado un mecanismo para conciliar con esta empresa buscando un plan de pagos y el municipio esta a puertas de un cuantioso proceso jurídico entablado por el concesionario y nuestro pueblo seguirá a oscuras pagando una contribución injusta que puede ser demandada”.
Las cosas están así de claras, el problema existe, sólo con voluntad, responsabilidad, ganas y verdadera vocación de servicio y el interés por lo general y no lo particular, podemos comenzar por un buen camino.
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