A Almudena Espinosa no parecen gustarle las medias tintas. Y cuando se propone hacer algo, es complicado que los obstáculos que se encuentra en el camino le hagan cambiar de idea. Fue tras un viaje por Colombia, la tierra de su madre, cuando decidió que tenía que montar un negocio de complementos. "Tenía una tienda de decoración en Madrid con mi hermana, pero después de ver las materias primas que tenían allí, lo tuve claro".
Tras mucho viajar, descubrir, mirar, comparar y preguntar, Almudena conoció la historia de la tribu de los wayuu. "En ella las mujeres aprenden a tejer desde que nacen casi. Lo hacen en ganchillo, una técnica que pasa de generación en generación y que constituye un elemento clave de su cultura". En 1994 hizo el primer viaje a La Guajira, región del norte del país. Y vio los auténticos bolsos wayuú: "Me fascinaron". El eco de las 'celebrities', que también se han rendido a sus encantos, ha hecho el resto.
"Nosotros hacemos el original, el de una hebra" -también lo hay de dos, pero no tienen nada que ver-. Cada bolso de Guanábana, como se llama la marca, es hecho a mano y no hay dos iguales. "Tardan 15 días en hacer cada uno". Los primeros contactos con las mujeres de la Guajira no fueron fáciles. "Tienen otros tiempos, sus condiciones de vida no son fáciles; no tienen agua, ni luz, hay época de mucha sequía".
Pese a todas las adversidades, Almudena siguió confiando en su instinto. Costó ganarse la confianza de la gente, pero con el tiempo todo llegó. "Cada familia de la zona tiene un dibujo, una historia asignada, y ése es el que puede plasmar en sus bolsos".Los colores vivos y las formas geométricas son típicos . "A veces hacerles llegar todo el material para trabajar es toda una odisea". Aquí los tratos se sellan con un simple apretón de manos.
En la actualidad , trabajan con cinco grupos de mujeres wayuu. Cada vez que Almudena viaja a la zona, convive con las familias. "Hay más de 400 mujeres trabajando en los pedidos de Guanábana". Ahora han ampliado los modelos y han metido en la colección de clutches. Hay una coordinadora que se encarga de distribuir el trabajo y el hilo. "Una vez terminados los bolsos, se les paga directamente". Guanábana es un proyecto que más allá de modas.
Tomado de: http://www.elmundo.es/
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