Cinco años después de la muerte de Luis Andrés Colmenares, la Fiscalía no ha podido dar a conocer todas las pruebas.
Laura Moreno es investigada por la justicia tras la muerte del joven estudiante. Foto: Archivo SEMANA
El juicio en contra de Laura Moreno y Jessy Quintero por la muerte de Luis Andrés Colmenares sigue estancado. A cinco años del fallecimiento del joven estudiante, cambios de fiscales y jueces que llevan el caso y otras singularidades judiciales han hecho que el proceso pierda impulso.
Ante esa circunstancia, los padres del joven solicitaron celeridad para que se le ponga punto final a esta triste historia.
La muerte de Colmenares, ocurrida el 31 de octubre del 2010, es uno de los casos emblemáticos de la justicia y de los medios de comunicación que le dieron en su momento un amplio despliegue, pero desde hace meses este ha pasado a un segundo plano, una de las razones es la congestión del juzgado 11, que lo examina.
Los padres del joven, que siguen mostrando la misma entereza del primer día, le solicitaron a la juez 11, Paula Astrid Jiménez Monroy, agilizar las audiencias del juicio y que “se evalúe la posibilidad de reprogramar las sesiones aumentando las mismas, todo de común acuerdo con las partes”, se lee en un carta entregada por la familia a la jueza que lleva el caso, Paula Astrid Jiménez Monroy, la cual fue conocida por Semana.com.
La preocupación no es menor si se tiene en cuenta que desde octubre del 2014, el juicio perdió el ritmo tras el paro judicial y luego de su reinicio se han realizado pocas audiencias. En lo que resta del año están programadas 14 sesiones, número que para la familia es insuficiente.
“Este año con la programación, ni siquiera alcanzamos a terminar las pruebas de la Fiscalía. Si eso es así, qué se puede pensar de las pruebas de la defensa”, aseguró Luis Alfonso Colmenares, padre del joven.
El juicio está en etapa de pruebas por parte de la Fiscalía y falta escuchar al experto forense Máximo Duque. El análisis sobre la muerte del estudiante podría tardar no menos de cuatro sesiones. Además quedan por oír al menos 100 horas de grabaciones de audios de llamadas telefónicas relacionadas con la muerte.
Cartas
La preocupación de la familia Colmenares es tan grande, que a finales de julio le enviaron una carta a la Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura para solicitarle al alto tribunal apoyo y que se asigne un juez adicional ya que a ese juzgado llegaron 240 casos más.
La respuesta del alto tribunal a la familia fue que se crearon dos juzgados penales del circuito de conocimiento de descongestión para evacuar procesos y ayudar al juzgado 11. Además también se crearon dos cargos de descongestión para realizar la misma tarea.
Para los Colmenares, ahora no existe excusa para que no se le dé celeridad al proceso, ya que con las medidas adoptadas se ha descongestionado el juzgado. Por ahora los próximos 3 y 4 de septiembre se van realizar las próximas audiencias, ese día la familia ratificará su petición de que el caso por fin avance.
Publicar un comentario
Gracias por su comentario