Desde
muy temprano, miembros de las comunidades de las microcuencas de los arroyos
Bruno y Pupurema, se acercaron al punto de acopio de residuos sólidos de su
comunidad, listos para participar en la IV Jornada de recolección de residuos
postconsumo convocada por la Corporación Autónoma Regional de La Guajira,
Corpoguajira.
Después
de recolectar elementos como medicamentos vencidos, envases y empaques de
plaguicidas, electrodomésticos, bombillas y luminarias, pilas y baterías
usadas, elementos electrónicos, entre otros, miembros de las comunidades,
acompañados por colaboradores de la Fundación Cerrejón, se dirigieron a la sede
de Corpoguajira en Fonseca para la adecuada disposición final de los residuos,
jornada que se desarrolló de manera simultánea en los municipios de Riohacha,
Maicao y San Juan del Cesar.
“La
actividad de hoy me parece excelente, sé que con estas jornadas se contribuye a
la limpieza de nuestro territorio y el medio ambiente, por eso mi comunidad y
yo estamos muy agradecidos de que nos hayan tenido en cuenta”, expresa Shintia Ipuana,
miembro de la comunidad Río de Janeiro.
Las
comunidades participantes de estas jornadas fueron La Horqueta, Campo Herrera,
Pitulumana II, Coveña, Cerrejón 1 y Río de Janeiro, donde la Fundación
Cerrejón, a través del programa Manejo Integrado de Cuencas, permanentemente
realiza talleres para abordar la problemática ambiental de contaminación de
residuos y promover el manejo adecuado y disposición final de los sólidos.
“En
las comunidades se realizan actividades para aprender sobre la segregación de
los residuos sólidos en la fuente, como la estrategia de las 3R: Reducir,
Reutilizar y Reciclar, así como también utilizamos el código de colores como
mecanismo de identificación”, explica Jorge Meza, Ingeniero Ambiental y
Sanitario del proyecto MIC Bruno y Pupurema.
La
convocatoria fue organizada por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible
en alianza con Corpoguajira y otras organizaciones, con el objetivo de brindar
herramientas para el manejo adecuado de residuos contaminantes una vez los
productos terminan su vida útil, como una estrategia dirigida a promover la
gestión ambientalmente adecuada de los residuos postconsumo, con el fin de que
sean sometidos a sistemas de gestión diferencial y evitar que la disposición
final se realice de manera conjunta con los residuos de origen doméstico.
“Los
residuos que hoy recolectamos son peligrosos y no deben llevarse a los rellenos
sanitarios. Queremos que todos participen de esta campaña, que saquen de sus
casas e instituciones esos elementos que han cumplido con su vida útil.
Agradecemos la participación activa de la Fundación Cerrejón de la mano de las
comunidades indígenas, quienes son multiplicadores de estas iniciativas”, puntualiza Miladis Murillo, miembro
del equipo de Educación Ambiental de Corpoguajira, en Fonseca.
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